2 visitantes de Bogajo Salamanca

        Uno de los problemas de los pueblos pequeños es el abastecimiento de productos necesarios para el día a día. Bogajo no podía ser menos.
        Los miércoles por la mañana nos visita el camión del butano: basta con dejar la bombona a la puerta y el butanero se detiene para dejar una llena.
        Los viernes de 9 a 2 es el turno del camión de Marianito, aunque ahora sea Tomás el que lleve el negocio. Carne, fruta, pescado, papel higiénico, verdura, yogur, helados, bombillas...todo una tienda de ultramarinos sobre ruedas; ¡ah! y también charla, mucha charla.